Tras la puerta, se encierran las horas perdidas.
Tras la puerta, se oculta el miedo.
Tras la puerta, se transforman las cosas y la gente.
Tras la puerta, se cierran las fronteras de la vida.
Tras la puerta, se esconden las miserias, despierta
el monstruo.
Tras la puerta, lágrimas negras, enmudece el llanto.
Vivian Esteban