Palabras mudas

 

 

 

 

Selladas están en los labios las palabras mudas.

Ahogan la garganta como orca.

Anidan como enjambres en el cerebro.

Como metralla que quiere salir del cañón.

Mordaza que ahoga pensamientos.

Miradas que hablan lo que las bocas callan.

Sentimientos heridos que arrancan las raíces

de la carne, del rencor.

 Metralla incrustada en la carne.

La última gota de sangre que queda en las venas,

derramada en el dolor de lo perdido, en la siembra del rencor.

En surcos renacen las amapolas de roja sangre.

 

Vivian Esteban

Ilustración

 Para uno de los relatos ganadores del certamen de Filanderes

Para el libro que se publicará.

Fiesta de los muertos mejicana. 

Fuerte

 

Soy fuerte:

Aunque a veces todo se derrumbe.

Aunque las ilusiones a veces se evaporen.

Soy fuerte:

Aunque los que creí que nunca me abandonarían

me dieran la espalda.

Soy fuerte:

Porque me caigo y tengo la capacidad de levantarme sola.

Porque no necesito mentir ni pisar a nadie.

Soy fuerte:

Porque me arreglo para mí, me pinto una sonrisa con carmín y,

endulzo mis días con música, pintura, poesía y amor.

Soy fuerte:

Porque siempre pude y siempre podré.

Deseo el éxito de los demás porque será el mío también.

Por eso creo soy fuerte, porque coso los retales

 de mi vida con con sutura de ilusión y amor propio.

 

Vivian Esteban

Desde una estrella

 

Dime al oído suave y despacito,

lo mucho que me quieres cariño mío.

Dime que aunque los años pasen,

estarás siempre conmigo.

Dime que una huella dejare en tu destino.

Que soñaras siempre conmigo.

Dímelo al oído cuando me abrazas y me dices te quiero,

no me dejes vacío el camino.

Ríete a carcajadas cuando te hago cosquillas y me digas quiero estar siempre contigo.

Dime al oído suave y despacito que

el día que yo me muera no lloraras,

porque te hare reír desde el infinito y

 desde una estrella hablare siempre contigo.

 

A mi nieta.

 

Vivian Esteban

Amapola

Rojo amapola,

delicada tu danza abrazada por el viento.

Libre naces al encuentro de caminos y trigales.

Rojo apasionado, tú amapola,

como carmín en labios soñados.

Vivian Esteban